lunes, 25 de octubre de 2010

Figuras Retóricas Colgate



ONOMATOPEYA:
- Bang, bang! Colgate combate la caries.
- Brush, brush! y se acabó la caries.
- Auch! Necesito Colgate.


PARANOMASIA:
- La caries te sale cara.
- Colgate no te dejará colgado.
- Colgate la caries combate.


SINESTESIA:
- Te sentirás tan fresco como en el Polo Norte.
- Colgate tu guardián de la caries.


SILEPSIS:
- La limpieza no es sólo de boquilla.
- Cuidarte no es de dientes para afuera.


ANTÍTESIS:
- Ríndete a Colgate  y lucha contra la caries.
- Hola a la limpieza y adiós a la caries.
- Llega Colgate y se va la caries.


HIPÉRBOLE:
- La caries no existe con Colgate.


IRONÍA:
- Despide a tu dentista si no te recomienda Colgate.


METÁFORA:
- Tu mejor dentista se llama Colgate.
- Colgate es el arma más eficaz para combatir la caries.


PERSONIFICACIÓN:
-  La caries está desahuciada.
- Colgate mata a la caries.


INTERROGACIÓN:
- ¿Todavía no sabes cuál es el remedio contra la caries?

lunes, 18 de octubre de 2010

Vocabulario

atabal

  1. m. Timbal de forma semiesférica con un solo parche.
ajorca
  1. f. Aro grueso de metal que se lleva como adorno en el brazo, la muñeca, la pierna o el tobillo:
binza
    1. f. Película que tiene la cebolla por la parte exterior.
    2. Telilla que recubre la parte interior de la cáscara del huevo.
    3. Telilla que se forma en la superficie de un líquido caliente y en reposo:
      no soporto la binza del café con leche.

fútil

  1. adj. De poca importancia, insignificante:
    asunto fútil.

huaso, sa

  1. m. y f. amer. Hombre del campo.
  2. amer. col. Maleducado, de malos modales.

mucamo,ma

  1. m. y f. amer. Sirviente,criado:
    la mucama se encarga de la plancha.
  2. amer. Persona encargada del arreglo de las habitaciones en un hotel.

óbito

  1. m. Fallecimiento de una persona.

pacato,ta

  1. adj. Pacífico,tranquilo:
    carácter pacato.
  2. Insignificante,de poco valor.
  3. Timorato,mojigato:
    no ha conquistado a esa chica por pacato.

sibila

  1. f. Mujer sabia a quien los antiguos griegos y romanos atribuyeron espíritu profético:
    consultaron a la sibila antes de emprender la batalla.

yapa

  1. f. amer. Añadidura, regalo que hace el vendedor al comprador.
  2. de yapa loc. adv. amer. Por añadidura.
  3. amer. Gratuitamente, sin motivo.

domingo, 17 de octubre de 2010

Sólo un León caza a otro León


Sólo un León caza a otro León
SEAT LEÓN. Run bad boys.


1984 (George Orwell) Primera parte. Capítulo 1.
Era un día luminoso y frío de abril y los relojes daban las trece. Winston Smith, con la barbilla clavada en el pecho en su esfuerzo por burlar el molestísimo viento, se deslizó rápidamente por entre las puertas de cristal de las Casas de la Victoria, aunque no con la suficiente rapidez para evitar que una ráfaga polvorienta se colara con él. El vestíbulo olía a legumbres cocidas y a esteras viejas. Al fondo, un cartel de colores, demasiado grande para hallarse en un interior, estaba pegado a la pared. Representaba sólo un enorme rostro de más de un metro de anchura: la cara de un hombre de unos cuarenta y cinco años con un bigote negro y facciones hennosas y endurecidas. Winston se dirigió hacia las escaleras. Era inútil intentar subir en el ascensor. No funcionaba con frecuencia y en esta época la corriente se cortaba durante las horas de día. Esto era parte de las restricciones con que se preparaba la Semana del Odio. Winston tenía que subir a un séptimo piso. Con sus treinta y nueve años y una úlcera de varices por encima del tobillo derecho, subió lentamente, descansando varias veces. En cada descansillo, frente a la puerta del ascensor, el cartelón del enorme rostro miraba desde el muro. Era uno de esos dibujos realizados de tal manera que los ojos le siguen a uno adondequiera que esté. EL GRAN HERMANO TE VIGILA, decían las palabras al pie.
Dentro del piso una voz llena leía una lista de números que tenían algo que ver con la producción de lingotes de hierro. La voz salía de una placa oblonga de metal, una especie de espejo empeñado, que formaba parte de la superficie de la pared situada a la derecha. Winston hizo funcionar su regulador y la voz disminuyó de volumen aunque las palabras seguían distinguiéndose. El instrumento (llamado teidoatítalia) podía ser amortiguado, pero no había manera de cerrarlo del todo. Winston fue hacia la ventana: una figura pequeña y frágil cuya delgadez resultaba realzada por el “mono” azul, uniforme del Partido. Tenía el cabello muy rubio, una cara sanguínea y la piel embastecida por un jabón malo, las romas hojas de afeitar y el frío de un invierno que acababa de terminar.
Afuera, incluso a través de los ventanales cerrados, el mundo parecía frío. Calle abajo se formaban pequeños torbellinos de viento y polvo; los papeles rotos subían en espirales y, aunque el sol lucía y el cielo estaba intensamente azul, nada parecía tener color a no ser los carteles pegados por todas partes. La cara de los bigotes negros miraba desde todas las esquinas que dominaban la circulación. En la casa de enfrente había uno de estos cartelones. EL GRAN HERMANO TE VIGILA, decían las grandes letras, mientras los sombríos ojos miraban fijamente a los de Winston. En la calle, en línea vertical con aquél, había otro cartel roto por un pico, que flameaba espasmódicamente azotado por el viento, descubriendo y cubriendo alternativamente una sola palabra: INGSOC. A lo lejos, un autogiro pasaba entre los tejados, se quedaba un instante colgado en el aire y luego se lanzaba otra vez en un vuelo curvo. Era de la patrulla de policía encargada de vigilar a la gente a través de los balcones y ventanas. Sin embargo, las patrullas eran lo de menos. Lo que importaba verdaderamente era la Policía del Pensamiento.


Partiendo de estos dos textos intentaré comentar brevemente las principales diferencias y similutdes entre ellos:

En primer lugar, técnicamente, nos encontramos frente a dos tipos de textos diferentes. Uno de ellos, el de la novela, es un texto muy descriptivo mientras que en el anuncio podemos hablar de un texto metafórico, directo y no descriptivo.
Entrando ya en el contenido de ambos textos la primera gran diferencia son los niveles jerárquicos que marcan. En la novela hay dos grandes grupos muy diferenciados: el del poder frente al de la sumisión, con una barrera infranqueable entre ellos. Sin embargo el texto del Seat León borra esta frontera poniéndote a la misma altura que los poderosos, los depredadores, en definitiva de la ley, solamente con poseer un uno de sus coches.
Siguiendo con el punto anterior podemos centrarnos en el tema de la tecnología, proporcionalmente relacionada en ambos con el poder. La diferencia es que mientras en la novela la tecnología es inalcanzable por los que están fuera de él, en el anuncio de Seat León la ponen al alcance de tu mano, de cualquier persona, haciéndote saber que adquiriéndola llevas las riendas de tu vida sin ser continuamente vigilado o perseguido, si no que tú marcas tu ritmo y tus fronteras. Tecnología  = poder.
En cuanto a la intencionalidad también encontramos una diferencia fundamental.  En la novela es totalmente sumisa pero en el anuncio muestran una actitud transgresora, como vemos en su eslogan Run bad boys. En conclusión, te venden libertad de actos y de mente incitándote a tomarte la justicia por tu cuenta, a llegar tan lejos como pueda hacerlo el sistema establecido.

San Dimas 4, parte de ti.


Hogar…  ese lugar en el que te sientes arropado, que sientes como tuyo y en el que actúas con sinceridad. El escondite necesario en la ajetreada vida de ciudad y donde van dirigidos tus pensamientos cuando necesitas privacidad y protección.

Si acabas de llegar a Madrid y buscas habitación, desde San Dimas 4 te ofrecemos el lugar que estabas esperando. No se trata de un espacio lujoso, amplísimo o perfectamente decorado. Es mucho más que eso. Hablo de la oportunidad de crear tu hogar, tu refugio, un espacio en el que formar una segunda familia y en el que cada uno de nosotros somos un eslabón imprescindible. Se trata de un rincón de gente joven, llena de ilusión y que mira al futuro de frente, seguros de que está lleno de posibilidades que cada día se abren ante nosotros.
Alquilar nuestra habitación significa mucho más que pagar por un sitio en el que dormir; es estar rodeado de amigos, sentirte uno más entre nosotros desde el primer día. Es muy normal venir a la capital en busca de trabajo, de oportunidades o de un buen sitio en el que estudiar pero quién no siente estar dando un salto al vacío, hacia la incertidumbre del qué será de mí. Los comienzos son siempre una etapa difícil en la que se necesita un extra de energía para marcar el rumbo que deseas, por eso desde nuestra morada, y la tuya si lo deseas, sabemos la importancia de combinar tanto la intimidad, el silencio o la tranquilidad, con la amistad, el concepto de unidad y los buenos momentos compartidos.

Porque una habitación en un piso que no sientes tuyo, en el que no sientes la calidez de tus compañeros y que acaba siendo una burbuja de aislamiento, no merece la pena. Y porque tenemos conciencia de que el estado anímico influye y es esencial para todos los aspectos de la vida, no pierdas la esperanza si aún no has encontrado tu sitio.

Queremos invitarte a compartir un hogar + una ciudad que llenar de recuerdos + amigos que te durarán toda la vida y una habitación de 10 metros cuadrados por sólo 330€ mensuales.  No está mal, ¿no?

No dudes en venir a visitarnos a San Dimas 4, 2º izquierda, y comprobar que realmente éste es el piso del que quieres formar parte.